El escritor, semiólogo y filósofo italiano, fallecido este viernes a los 84 años, a lo largo de su vida dictó sentencia sobre temas tan diversos como los libros, el periodismo, las redes sociales, Dios, los padres... Estas son algunas de sus frases más célebres:
"El mundo está lleno de libros preciosos que nadie lee”.
"El narrador no debe facilitar interpretaciones de su obra, si no, ¿para qué habría escrito una novela, que es una máquina de generar interpretaciones?”.
"No son las noticias las que hacen el periódico, sino el periódico el que hace las noticias, y saber juntar cuatro noticias distintas significa proponerle al lector una quinta noticia".
"Las redes sociales le dan el derecho de hablar a legiones de idiotas que antes hablaban solo en el bar después de un vaso de vino, sin dañar a la comunidad. Entonces eran rápidamente silenciados, pero ahora tienen el mismo derecho a hablar que un Premio Nobel. Es la invasión de los imbéciles".
"Creo que aquello en lo que nos convertimos depende de lo que nuestros padres nos enseñan en pequeños momentos, cuando no están intentando enseñarnos. Estamos hechos de pequeños fragmentos de sabiduría".
"El amor es más sabio que la sabiduría".
"Cuando los hombres dejan de creer en Dios, no quiere decir que creen en nada: creen en todo".
"Hoy, cuando afloran los nombres de corruptos o defraudadores y se sabe más, a la gente no le importa nada y solo van a la cárcel los ladrones de pollos albaneses".
"Hoy no salir en televisión es un signo de elegancia".